La sección 580 del RETILAP establece los requisitos para la operación y mantenimiento de los sistemas de alumbrado público. A continuación, se presenta un resumen de sus puntos principales:
Los sistemas de alumbrado público deben contar con un plan de operación y mantenimiento que incluya el mantenimiento preventivo y correctivo, y el reemplazo de las luminarias, soportes y otros elementos.
El mantenimiento preventivo debe incluir la limpieza, ajuste y lubricación de los equipos, la inspección de los componentes eléctricos, la medición de los niveles de iluminación y el registro de los resultados.
El mantenimiento correctivo debe realizarse cuando se detecte una falla en el sistema, y debe incluir la identificación y corrección de la causa de la falla.
El reemplazo de las luminarias y otros elementos debe realizarse cuando se presenten fallas irreparables o cuando su vida útil haya expirado.
Se debe llevar un registro detallado de las operaciones de mantenimiento y los resultados de las mediciones de iluminación.
Los sistemas de alumbrado público deben ser operados de manera que se minimice la contaminación lumínica, evitando la emisión de luz hacia el cielo y las zonas no destinadas a la iluminación.
Se deben establecer procedimientos para el manejo de emergencias y la atención de reclamos por parte de la comunidad.
Se debe contar con personal capacitado y equipamiento adecuado para la operación y mantenimiento de los sistemas de alumbrado público.