Los sistemas de control automático de iluminación deben estar diseñados para adaptar la cantidad de iluminación artificial a la cantidad de luz natural presente en el espacio.
Estos sistemas de control deben ser capaces de detectar y medir la luz natural y ajustar automáticamente la cantidad de luz artificial para cumplir con los requisitos de iluminación necesarios. Además, deben contar con dispositivos que permitan a los usuarios controlar la iluminación artificial en función de las necesidades y actividades específicas que se lleven a cabo en el espacio.
También se establecen requisitos técnicos y de eficiencia energética para los sistemas de control de iluminación. Deben estar diseñados para minimizar la cantidad de energía consumida por la iluminación artificial y deben contar con sensores y controles que permitan apagar o reducir la intensidad de las luces en áreas no utilizadas o durante períodos de baja actividad.
Por último, se deben realizar pruebas y mediciones periódicas para verificar que los sistemas de control automático de iluminación estén funcionando correctamente y cumpliendo con los requisitos de eficiencia energética establecidos en el RETILAP.